Gilles de Rais fue un barón, terrateniente y mariscal de Francia que alcanzó la gloria militar en el contexto de la Guerra de los Cien Años, siendo compañero de armas, protector y admirador de Juana de Arco.
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Pocas figuras hacían sombra al sire de Rais en cuanto a poder feudal, prestigio y posesiones. Sin embargo, en lo que destacó por encima de todo fue como criminal, pederasta, sádico y hereje, y el folclore bretón se inspiró en él para crear la leyenda de Barba Azul.
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En este viaje al pasado más sórdido descubriremos que la monstruosidad de Gilles de Rais fue un reflejo del mundo en que vivió, marcado por los excesos del feudalismo. Cuando dejó de batallar prolongó la costumbre de matar realizando los asesinatos más despreciables.
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En el caso del barón de Rais, la barbarie guerrera medieval se combinó con una fascinación enfermiza por el sufrimiento ajeno, la sangre, la violación y la muerte de niños.
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